jueves, 30 de octubre de 2014

EL HALLOWEEN ESPAÑOL

¿Miedo a Halloween? ¡A mí lo que me pone los pelos como escarpias es el panorama político y social español!Y de fiesta importada, nada de nada: aquí seguimos como en los tiempos del Lazarillo de Tormes, pero ampliando horizontes con los recursos que nos ofrecen las nuevos tiempos y la tecnología. Hemos pasado de engañar a los ciegos a desvalijar a los viejos con las preferentes; de
esconder las monedas robadas bajo el jergón a ponerlas a buen recaudo en los bancos suizos. Del timo de la estampita a la ingeniería financiera. De vender pócimas milagrosas con el carro por los pueblos, a ofrecer recetas milagrosas en los programas electorales.
No nos privamos de "ná". Tenemos chupasangres financieros, zombies políticos como Aznar, brujas que juegan a su particular aquelarre como Esperanza Aguirre, ministros fantasma que no paran de darnos sustos como Montoro y Wert,
aparecidas en el mundo de la política como Ana Mato; Reyes decapitados que viven en la sombra;
niñas de la curva, del desempleo, claro, como la Báñez; troles de la independencia como Junqueras;
cadáveres de políticos crucificados como Gallardón; la momia de Pujol y los tesoros que ocultaba en su sarcófogo; druidas patosos como Mas, que no acaba de dar con la pócima de la consulta;
la nueva peste en forma de ébola, que todos se quieren sacudir de encima; desaparecidos como Rajoy,
que solo toman cuerpo en forma de plasma...Y ese Niño del Exorcista, llamado el Pequeño Nicolás, aprendiz
aventajado de sus mayores, que se aparece más en las fotos que la Virgen de Lourdes...Y con semejante desfile de Freddy Krugers domésticos, es comprensible que no seamos capaces de conciliar
el sueño. A algunos también les da pánico el nacimiento de un grupo de Iluminados, llamémosles PODEMOS, que se alimentan día a día de la carroña y los despojos que dejan a su paso la Casta de los Buitres. Esa Casta que, toda a una, cual Príncipe más Acojonado que Valiente, ha sacado a relucir supuestos fantasmas bolivarianos y terroristas para batir a ese grupo voraz que se asombra del monstruoso volumen que ha alcanzado, casi sin quererlo. Veremos, si en el futuro, todo se queda en hechizo o, por el contrario, sus propuestas se encarnan en soluciones.
De momento, vivimos en el Parque Temático del Terror, donde se ha descuartizado la Sanidad, se ha hecho picadillo la Educación, y reducido a cenizas las prestaciones sociales. El paro se ha convertido en el escenario habitual de millones de Walking Deads arrojados de sus puestos de trabajo.
Nuestros jóvenes han tenido que coger el Expreso de Hogwarts y aprender a echar mano de la varita mágica en tierras lejanas. Y los que se han quedado, luchar cada día con los Lords Voldemort de turno por un salario vomitivo. Cada mañana nos desayunamos con nuevos casos de corrupción, casi de putrefacción, protagonizados por políticos, financieros, consejeros, sindicalistas, miembros de la Casa real y otros seres monstruosos, que se dedican a sacarnos los higadillos,
sesgarnos nuestro futuro en una Matanza de Texas brutal, que deja al Hombre del Saco, ese que ellos se han llenado a rebosar, a la altura de Blancanieves.
Y lo peor, es esa sensación terrorífica que nos invade, siempre latente, sobre ¿qué aberración acontecerá hoy?
Y sí, ya se que nadie es perfecto.
Pero lo nuestro más que imperfección es atrocidad.

No hay comentarios:

Publicar un comentario