jueves, 27 de febrero de 2014

GALLARDÓN : MIS CREENCIAS SON LEY

Respeto mucho las creencias religiosas del Sr. Gallardón y su postura contra del aborto, al igual que las de todos aquellos que están a favor. Pero lo que no me parece tan respetable es que algo que debería pertenecer a la esfera íntima y personal de cada uno se trate de imponer al resto por la vía legal, abusando del privilegio de ocupar un puesto político, y en especial, cuando la Constitución española recoge  expresamente que nuestro Estado es laico y aconfesional. ¿Qué vendrá después? ¿La reforma de la Ley del Divorcio? Porque el matrimonio es indisoluble ante lo ojos de Dios (bueno, y ante el Tribunal de la Rota si te concede la gracia divina por delegación celestial y alguna prestación económica, para qué vamos a andarnos con tonterías) Y ya puestos, ¿por qué no ilegalizar el matrimonio civil, que ni es matrimonio ni es "ná" porque no está bendecido por la santa Madre Iglesia...
 Es como si Díaz Cañete, a la sazón, Ministro de Agricultura, además de obligarnos a comer los yogures caducados porque a él se la repanfinfla, se hiciera vegetariano y por ello nos  impusiera una Ley vegana, que salvo algunos supuestos como carencia de hierro o alguna proteína y vitamina, pero en cualquier caso, sólo por prescripción facultativa, estaríamos autorizados a consumir carne.
¿Y qué pasaría si llegaran a Ministro políticos de religiones diversas y, como Gallardón, quisieran hacer de sus creencias una Ley general? Cabe la posibilidad de que se hiciera con el Ministerio de Educación y Cultura un creacionista, ya sabéis, que defienda una explicación del origen del mundo basada en uno o más actos de creación por un dios personal, y eliminara por decreto de los libros de nuestros hijos la teoría de la evolución y la carrera de Biología. O si el Ministro de Sanidad de turno, fuera miembro de los Testigos de Jehová quizá tendría la idea de prohibir las transfusiones sanguíneas porque lo manda su religión. Pero ahondando más en el tema de las creencias, imaginad por un momento que un musulmán llega a Ministro de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, y decide que según reza en sus leyes no está permitido comer cerdo ni beber vino y de un plumazo se carga toda la industria porcina y vinícola del país. ¿Y qué pasaría si este ministro profesara la religión hinduísta? Pues que las vacas serían intocables y aquí todos añorando aunque fuera un mal filete de ternera sin que nadie pueda decir ni "mú".
También puede darse el caso de que un día tuviéramos un Ministro de Cultura budista que decidiera eliminar todas las fiestas populares porque según se recoge en su decálogo de mandamientos: el budista no participará de diversiones mundanas.No concurrirá a presenciar aquello que excite sus sentidos o que tienda a rodearlo de un ambiente materialista, porque la seducción de la mundanalidad es capaz de hacerle olvidar su falsedad e irrealidad. Deberá permanecer solo y sereno, meditando en cosas elevadas, libre de los enredos de los sentidos.
Por si fuera poco, no sería extraño que un seguidor de la religión judía alcanzara el puesto de Ministro de Industria y decidiera cerrar todas las hamburgueserías, pizzerías y restaurantes italianos del país, o al menos, hacer una ley restricitiva de sus cartas porque no les está permitido mezclar carne con cualquier derivado de la leche, osea, no se puede comer un cheeseburger (queso con hamburguesa), lasagna de carne (carne y queso) o pizza con carne.¿Y qué comida basura nos queda? Y ya la confusión suprema llegaría con el Ministro de Trabajo que, dependiendo de sus preceptos respectivos, serían festivos los viernes (musulmán) los sábados (judíos) o los domingos (católicos). Desconozco si los budistas, los hinduístas, y el resto de las confesiones tienen un día diferente de celebración, lo cual sólo serviría para aumentar el caos.
Y ya puestos a imaginar, podría darse el caso extremo de que llegara un talibán al gobierno, y nos cubriera a las mujeres de la cabeza a los pies con solo una ranurita para mirar, nos expulsara de los colegios, de las universidades, de los trabajos y nos encerrara en casa, que destruyera todas las imágenes y obras de arte...Eso sí, todo por vía legal. Es lo que pasa cuando la religión se confunde con la política. Y encima se tiene la mayoría absoluta. Así que a Dios lo que es de Dios, y al César lo que es del César. Y si quiere usted rezar y ser un buen cristiano, Señor Gallardón, póngase un altarcillo en casa, o si me apura en el Ministerio, pero no nos haga comulgar con Leyes de molino.
Porque nadie es perfecto, pero usted se cree Dios.

¿COCIENTE INTELECTUAL? ¡NO! EL COCIENTE AGALLAS


Vivimos tiempos convulsos donde muchos de los mitos y valores que nos inculcaron de niños se resquebrajan ante la realidad. Se nos enseñó a ser buenas personas, solidarias, generosas y cada día asistimos a la conquista del éxito por parte de los individualistas, trepas y listillos, mientras que los buenos se quedan arrinconados en la cuneta.Parecía que la inteligencia, utilizando para medirla el parámetro del cociente intelectual, era la panacea para asegurarse triunfar en la vida. Pero ¿cuánta gente con un cociente intelectual altísimo ha resultado incapaz de desarrollar su trabajo con eficacia y relacionarse satisfactoriamente con sus semejantes, llevando una vida infeliz?  Tras muchas investigaciones se llegó a la conclusión de que no se puede hablar de una única inteligencia, sino de muchas más. Incluso se habla de que lo racional y emocional son las dos caras de la misma moneda y, aunque se puedan diferenciar, jamás se podrán separar.
En base a esta teoría y avanzando un paso más, Mario Alonso Puig propone una nueva idea que parte del "Cociente Agallas", donde la valentía es la esencia para modificar la forma de pensar de nuestro cerebro y cuyas consecuencias se traducen en una mejora de nuestra vida.
Puede sonar a otro libro de "autoayuda". Quizá penséis que nos hallamos ante otro "charlatán de feria" que se aprovecha de la crisis y sus secuelas para vender ilusiones enlatadas. Pero si lo traigo aquí, es porque he experimentado en mi entorno lo que él dice. Intuitivamente y sin base científica. Pero tengo la certeza de que un cociente intelectual alto de nada sirve, sino todo lo contrario, si no crees en ti, en el poder de ser el dueño de tu vida aunque los demás no te apoyen. Que el optimismo y el tesón son capaces de mover montañas y derrumbar muros. Que ser feliz, en el fondo, es una decisión personal, porque no importa lo que te pase sino cómo lo interpretas, el sentido que le das, apoyándote en la confianza en ti mismo.
Y ahora, que me rodean tantos casos de problemas laborales, existenciales y de salud, tanto de amigos como familiares, quisiera ofrecer una visión que nos hace más libres, porque sientes que la vida está controlada por ti, que tú puedes moldearla y dirigirla hacia la felicidad. Que la clave está en tu interior.
Os presento la reseña sobre el libro hecha por la editorial y un breve currículum de su autor, donde premios como el Espasa de Ensayo 2013, creo yo, avalan la seriedad de su propuesta.

"El Cociente agallas, de Mario Alonso Puig, es una amena indagación que nos pone al día de los últimos descubrimientos científicos que demuestran que con fe, esfuerzo y voluntad podemos, a cualquier edad, entrenar nuestro cerebro para aprender a ser optimistas, a minimizar los fracasos y a alcanzar el éxito. Algo para lo que resulta muy conveniente familiarizarnos con este manual que ayuda a acrecentar nuestro potencial y a emprender nuevas iniciativas venciendo los temores que nos frenan. El Cociente agallas ha sido galardonado con el Premio Espasa de Ensayo de 2013. Mario Alonso Puig es médico especialista en Cirugía General y del Aparato Digestivo, fellow en Cirugía por la Facultad de Medicina de la Universidad de Harvard, en Boston, y miembro de la Academia de Ciencias de Nueva York y de la Asociación Americana para el Avance de la Ciencia. Ha dedicado gran parte de su vida a explorar el impacto que tienen los procesos mentales en el despliegue de nuestros talentos y en los niveles de salud, de energía y de bienestar que experimentamos"

Y además, una breve explicación de la teoría en palabras de su autor:
"Hay que ser valiente para atreverse a soñar. Hay que ser valiente para persistir en medio de la dificultad. Hay que ser valiente para hacer algo nuevo y atreverse a fracasar. Hay que ser valiente para mantener la ilusión cuando todo el mundo cae en el pesimismo. El “Cociente Agallas” es en mi opinión la fuerza que desarrolla el carácter de una persona, es la fuerza que nos moldea, la que no permite que nos derrumbemos ante la dificultad, sino que sigamos adelante “contra viento y marea”. La valentía es esa fuerza que al fin y al cabo va creando poco a poco, paso a paso, nuestro propio destino.
La llamada a tener agallas
La valentía es lo que hace que defendamos aquello que es valioso y no permanezcamos indiferentes ante aquello que empequeñece y reduce al ser humano. De la misma manera que no hay que ser grande para empezar, pero sí que hay que empezar para ser grande, no hay que ser valiente para empezar, pero sí que hay que empezar para ser valiente. “Atrévete a pesar de tu miedo y te sentirás valiente” nos recordaba el profesor William James. El miedo no es nuestro enemigo, el pánico sí porque nos bloquea y nos anula. El miedo es sencillamente la llamada a ser valiente. La valentía es esa decisión firme, esa resolución de no pararnos, de seguir adelante cuando está en juego lo que de verdad importa"

Conozco a mucha gente y, seguro que vosotros también, con un Cociente agallas que bate todos los records, aunque hasta ahora no supieran ponerle nombre. Que cada día nos dan ejemplo en superar los obstáculos y las dificultades con una fuerza y una alegría inexplicables.  
Este post, va por ellos, y si además puedo conseguir una pequeña reflexión sobre el tema por vuestra parte o un estímulo a aquellos que se ejercitan cada día en el arte de ser un poquito más valientes, ya me doy por satisfecha.
Porque nadie es perfecto. Pero todos tenemos algo de valientes.

lunes, 17 de febrero de 2014

PREGUNTAS ESTÚPIDAS SOBRE LOS HOMBRES QUE ME CORROEN



¡Ay, queridos míos! Condenados a vivir juntos y a entendernos...Pero, ¿es ésto posible? No quiero profundizar en la herida, porque tengo hombres seguidores y no tantos lectores como para permitirme el lujo de prescindir de ellos, pero de verdad, que muchas veces he pensado que el eslabón perdido de Darwin, entre el mono y la mujer, son ellos: nuestros hombres. No todos, debo decirlo para ser justa, pero hay algunos que incluso, se hallan más cerca del mundo simio que del humano. Y si no, aquí van algunos ejemplos....

¿Por qué cuando los hombres se pelean se dan cabezazos y saltan para chocarse pecho contra pecho cual gorila enfurecido?¿No saben que existe un mecanismo, llamado palabra, que es muy útil en las discusiones?

¿Por qué hay hombres que la única conclusión que han sacado de la igualdad de géneros es que pueden pasar ellos primero por las puertas y dejar que ellas paguen la cuenta, pero no saben ni freir un huevo, y mucho  menos enfrentarse a la ciencia ficción doméstica, entiéndase, poner una lavadora?

¿Por qué hay hombres a quienes despierta el zumbido de una mosca, y sin embargo exhiben una sordera congénita ante los aullidos de bebé a medianoche y los gritos de los niños más creciditos reclamando agua?

¿Por qué hay hombres que siempre encuentran una causa hormonal cuando las mujeres los ponen en su sitio o no le ríen sus gracias? A: Lo que esa necesita es un polvo. B. Tiene la regla. C: Está menopáusica.

¿Por qué hay hombres que no aceptan su calvicie y exhiben una especie de deconstrucción capilar, en base a una hilacha larga de pelo que van enredando en elipse, para culminar en una suerte de ensaimada que da grima?


¿Por qué hay muchos hombres que sufren una especie de tic consistente en que la mano derecha se le va al escroto intermitentemente? ¿Es para comprobar que sus atributos siguen ahí indenmes? ¿Para colocárselos en posición de ataque? ¿Simplemente para poner de los nervios al que tiene enfrente?

¿Por qué en todos los bares de copas hay un individuo, normalmente con pantalón rojo, apostado en la barra sobre el brazo derecho, sujetando la copa con el izquierdo, y mirando al tendido con una sonrisa babosa, así entre exhibición y elección de presa?

¿Por qué hay tantos hombres, de mediana edad la mayoría, acostumbrados a que su mujer le pele la naranja y le aliñe la ensalada? ¿Es que son  mancos? ¿No vieron el capítulo de Barrio Sésamo titulado "Ya sé comer solito"?

¿Por qué hay tantos hombres españoles que cuando viajan al extranjero en verano van vestidos de "Coronel Tapioca" aunque visiten París? ¿Qué pretenden meter en el chaleco multibolsillos?¿O es que acaso lo utilizan para sacar del buffet del hotel, el almuerzo y la merienda para toda la familia?

¿Por qué hay muchos hombres para los que llevar los niños al parque significa que éstos vayan a su libre albedrío, libres hasta partirse la crisma, mientras ellos leen el periódico o chatean y hablan felices por el móvil, ajenos a la circunstancias? Y que conste que no exagero ni una "miajita"...He visto cosas que vosotros no creeríais, incluso angelitos de 2 años que se escurren por el cinturón de seguridad del carrito y se salen, sin que sus "entregados" padres se den cuenta...

¿Por qué hay tantos entrevistadores para seleccionar personal que miran más tu cuerpo que tu currículum?

¿Por qué algunos hombres cuando pasean a una mascota de una raza de pequeño tamaño, lo hacen con un gesto entre avergonzado y a la defensiva, como si no fueran con ellos, y casi les falta ponerse a silbar en un acto de patético disimulo?

¿Por qué hay hombres con esplendoroso mostacho que cuando beben no se limpian con la servilleta y se les queda un bigote que gotea cual morsa recién salida de los mares?

¿Por qué hay tantos hombres a los que "pedir la vez" les parece algo de "marujas" y organizan serios conflictos en las colas de las tiendas o aprovechan para colarse impunemente?

¿Por qué cuando dejas a un hombre al cuidado de tu bolso, lo sujeta con las dos manos contra su pecho como si estuviera rodeado por una banda de atracadores? ¿No es más fácil colgárselo? ¿O es que temen que los confundan con un Boris cualquiera?

¿Por qué hay hombres que consideran el mando a distancia un apéndice más de su mano y si quieres usarlo tienes casi que amputárselo?

¿Por qué los hombres tienen esa habilidad de no registrar en su memoria todo aquello que no les interesa? ¿Es un oído selectivo?¿Un borrador memorístico de serie? ¿Cuántas veces hay que repetir lo mismo sin que les quede la menor huella?

¿Por qué todos los hombres se creen un Fernando Alonso al volante y las mujeres a lo más que llegan es a Sor Citroen, desde su punto de vista?

¿Por qué en los semáforos notas como una tensión no declarada entre los conductores  masculinos apostados, como si estuviéramos en una parrilla de salida, en espera de comprobar quién arranca antes y con más potencia?

¿Por qué hay tanto hombres de mediana edad, con el estilo "Blancanieves" luciéndolo en los casposos hombros de sus trajes oscuros? ¿Es que no han visto los anuncios del champú "H&S"?

¿Por qué en todos los hombres hay un entrenador de fútbol impecable, un árbitro más que justo y un goleador que es un superhéroe, y con este triunvirato en su interior todos los lunes son capaces de ganar el partido de su equipo favorito?

¿Por qué hay tantos hombres que continuan llevando el peinado "Mario Conde" con el pelito engominado por arriba y los ricitos sueltos por abajo, como encajillo ?¿No saben que dan ganas de darles una colleja para que se les desabigarre el estilismo?


¿Por qué hay tantos hombres que consideran que sus secreciones íntimas (lapos, orines, etc) forman parte del acervo ciudadano y lo comparten sin límites en las aceras y rincones?


No quiero extenderme más. Seguro que a mis maravillosos lectores, y sobre todo lectoras, les surgen otras cuestiones. Pero todo tiene una medida y una cosa es comentar frívolamente y otra, el enseñamiento.
Porque nadie es perfecto.












lunes, 10 de febrero de 2014

LA GALA DE LOS "GOLLA"

¿Veis? Esto es lo que pasa cuando un Ministro de Cultura se ausenta de sus obligaciones. Que la gente acaba metiendo"patones"gramaticales dejando al descubierto la incultura por la falta de apoyo de un ministerio básico para el desarrollo del país. Andaba por ahí un señor con pajarita, gafas de concha y pelo a lo Lord Byron, con sonrisa perenne, que no se yo si era el sustituto del Excelentísmo Wert, y lo dudo porque no recuerdo que fuera presentado oficialmente, aunque a lo mejor me pilló en un momento que fui al baño. Y es que, esto de no tener publicidad está muy bien, pero para las galas de larga duración, o te deja con la vejiga a punto de explotar o hace que te pierdas alguna gracieta. El buen hombre lucía una estética nada sospechosa para codearse con la gente del cine, incluso mimetizarse, será por eso que lo eligieron...
Pero fue una lástima que el ministro en cuestión no asistiera. La Gala habría dado mucho más juego. Las dedicatorias habrían estado salpicadas de más puyitas, aunque Bardem y otros se encargaron de lanzarlas..Y es que siempre se puede confiar en los Bardem.
El Presidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio González, con rastros visibles de la ciclogénesis política originada por la Marea blanca, aguantó con serenidad esculpida a cincel los comentarios jocosos sobre el tema, sentadito muy formal al lado del Presidente de la Academia del Cine. Quizá no le dio tiempo a inventarse una excusa de agenda para ausentarse del evento. Aunque no debería ser tan mal  pensada. Simplemente aguantó con desgana disimulada, cual padre ejecutivo y estresado en la función de fin de curso de sus niños.
Pero esto es lo que tenemos. Semejante nivel de políticos, muy por debajo de la calidad de nuestro cine. Y no es que yo piense que nuestra industria cinematográfica sea para tirar cohetes, pero tal como está la cosa, bastante bien se está portando. Y no olvidemos, que el público también cuenta, y en un país donde lo que triunfa son los "Torrentes", no deberíamos echarle la culpa al "empedrao", sino como público psicoanalizarnos y entonar el "mea culpa".
En cuanto al guión de la gala, para mí que Manel Fuentes estuvo flojillo. Pero debo confesar mi pasión por Buenafuente, que le exime de mi  baja valoración. En cualquier caso, tampoco mucho peor que otras de los Oscar, e infinitamente superior que la del Festival de San Sebastián que duerme hasta las ovejas. Hubo momentos delirantes , y alguno sobresaliente, en el apartado de "Goya a la película no rodada", a cargo de  
Joaquín Reyes y el grupo Chanante. Y sentí una tremenda envidia al comparar nuestras pelís con la selección para la categoría de mejor película europea, donde obras como "Amor", "la Cacería", y "La vida de Adele" entre otras, merecían un premio cada una, no solo "Goyas" sino Oscar, Baftas, Osos de Berlín, César y todo los del Universo y Sistema Planetario, que diría Leire Pajín.
Otro aspecto que brilla con luz propia en este tipo de acontecimientos, es el glamouroso. Ese desfile de mujeres bellas y apuestos adonis en la alfombra roja, en su momento más Boris. Y aquí, tampoco desafinamos. Como siempre, hay quien acierta y quien no. Quien se disfraza y quien se viste. Quien se ve encorsetado e incómodo, y quien parece haber nacido entre tules, tacones y complementos. Y ya, para cada cual, su predilección. Habitual es el ránking de las mejor  y peor vestidas. Y hay quien se esmera por aparecer en el segundo, como diciendo, que hablen de mí aunque hablen mal.
Y a todo esto, algo que me perdí desde el primer momento...¿A qué santo viene llamarle "Premios Goya"?
¿Porque no Buñuel? ¿Es que estamos tan poco orgullosos de nuestro cine que hasta un pintor, sublime por más señas, tiene que ocupar el nombre de un cineasta, magistral también por más señas?
Y es que nadie es perfecto. Que se lo digan a Buñuel. Y a los "Gollas". Y , especialmente, al Ministro Wert.

viernes, 7 de febrero de 2014

PREGUNTAS ESTÚPIDAS SOBRE LAS MUJERES QUE ME CORROEN

 No, no es que me haya vuelto misógina. Pero es que hay acciones típicamente femeninas, que por reiterativas, me revuelven las hormonas. Y no es mi intención echar piedras sobre nuestro tejado, que ya tenemos bastantes, sino reflexionar sobre ellas con un punto de ironía. Ahí van unas cuantas...


¿Por qué cuando dejas pasar delante, en la cola del supermercado, a la típica abuelita que lleva sólo un paquete de arroz, luego se saca mil cosas más de la  manga? ¿Algo que ver con el milagro de la multiplicación de los peces?


¿Por qué cuando devuelves una prenda al perchero en la tienda, siempre hay detrás de ti una señora que se abalanza a por ella con cara de impaciencia?

¿Por qué tengo la sensación de que todas las mujeres altas (que comparadas conmigo constituyen el 70%) me miran por encima del hombro?

¿Por qué cuando vas a una exposición de pintura siempre hay un par de amigas, normalmente maduritas,que se cuelan interponiéndose entre el cuadro y tú y además lo comentan al tendido?


¿Por qué en el cine y en el teatro, en un momento dado, siempre hay una señora que desenvuelve un caramelo a uno por hora, para no molestar, alargando el proceso como si estuviera envuelto en metros de celofán y convirtiéndolo en una tortura?

¿Por qué hay tantas mujeres conductoras que en una mano llevan el móvil y el cigarro y con la otra se pintan la raya del ojo?¡Y luego dicen que no sabemos conducir!

¿Por qué cada vez hay más mujeres de rostro recauchutado, clónicas entre ellas y a imagen y semejanza de la Duquesa de Alba? ¿Es que no tienen un marido, una hija, una amiga o un mal enemigo que las disuadan de caer en las manos de un cirujano plástico?

¿Por qué hay mujeres que cuando te las presentan te hacen un escáner desde el dedo gordo del pie hasta el flequillo y si encima están en la etapa de la presbicia, incluso dan un paso atrás para aumentar su agudeza visual?

¿Por qué hay mujeres que cuando se habla de medidas, siempre se añaden 5 centímetros y se quitan kilos en la misma proporción?


¿Por qué hay mujeres que eligen un maquillaje tan oscuro y se olvidan de echárselo en el cuello, de manera que parece que la cara y el gaznate pertenecen a diferente raza?

¿Por qué hay mujeres que después de dejarse unos eurazos en la "pelu" para estar guapas, se convierten en pitufos de Carrefour, Lidl, Día o lo que se tercie, calzándose una bolsa de plástico en la cabeza, porque caen cuatro gotas?


¿Por que hay tantas mujeres jóvenes con las piernas a pelo, minifalda a la altura de las nalgas, cazadora cortita y luego, bufanda de siete vueltas de dimensiones gigantescas, gorros de la lana y orejeras? ¿Es que no saben que hay  vida, incluso cuerpo, del trasero hacia abajo?


¿Por qué hay tantas mujeres en VIPS dándose un atracón de tortitas con nata y sirope y para acompañar piden un café con SACARINA o una Coca-Cola Zero?

¿Por qué hay algunas madres que entienden que estamos obligados a compartir la mala educación de sus hijos, soportando en la espalda sus patadas a nuestro asiento, ya sea en el avión o en el autobús, tarareando con ellos las cancioncillas de Disney a todo volumen, o desentaponándonos los oídos en el aterrizaje con sus gritos, sin ni siquiera una leve recriminación por su parte?


¿Por qué hay mujeres dependientas que nos hablan siempre en plural?: Vamos a ver qué talla tenemos...Vamos a probarnos esto...¿Cómo nos queda?...¿Acaso vamos a pagar a medias?

¿Por qué hay señoras que van perfectamente peinadas por delante, y por detrás lucen una coronilla cual monje medieval con todas las entradas a la vista? ¿No conocen el truco del espejo?

¿Por que hay mujeres que más que echarse perfume se gasean?

¿Por qué las peluqueras siempre te hacen un análisis microscópico con cara de póquer dejando tu autoestima capilar a la altura del zapato?

Próximamente, las cuestiones que me inquietan sobre los hombres.
Porque nadie es perfecto.








jueves, 6 de febrero de 2014

CÓMO "CAGARLA" CON UNA EXPOSICIÓN: LÉASE CAG-ARTE

Sí, ya sé que el titular es de lo más escatológico. Incluso una ordinariez, que diría mi madre. Pero es que el tema que nos ocupa no pide menos. Tanto que el choli se me ha dado la vuelta como un calcetín. Porque el pintor Ausín Sáiz, que tenía previsto inaugurar una exposición en el edificio Julián Sánchez El Charro del Ayuntamiento de Salamanca, ha visto como sus ilusiones se iban por el váter. El equipo de Gobierno local, encabezado por el alcalde Alfonso Fernández Mañueco (PP), ha decidido suspender la muestra por contener "imágenes inadecuadas para el público". Entre sus obras se encontraban dos cuadros en los que aparecía el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy; y la infanta Cristina. Ambos, con heces en la cabeza. Un hedorífico tocado que hubiera hecho las delicias de las ladys de Ascot y causado furor en cualquiera de las Bodas Reales.


Según recoge el diario El País "Antes de montar la exposición les mandé folletos, información de mis creaciones y mi dossier. Conocían perfectamente cómo es mi obra de denuncia social", explica el artista, que acusa de "censura" al director de la sala, Lorenzo Bernáldez, y al Consistorio. "La decisión se ha tomado tras comprobar el contenido íntegro de la exhibición, inadecuadas para el público, eminentemente familiar, que acude a este espacio", se ha justificado la administración salmantina"
Ante la negativa del artista a desmontar la exposición, policias locales se presentaron en el recinto y pusieron las obras en plena calle, por no utilizar otro término políticamente incorrecto y que  también comienza por "p", dejándolas empaparse ante la lluvia que caía a bocajarro. Creo yo que era una manera, símbolica, de decirle: "Aquí no pintas una mierda.Y mira lo que hago con tus pinturas: tiro de la cadena"
Y no, estas no son formas. Porque yo no voy a discutir aquí si las obras son buenas o males, o ni siquiera si pueden constituir una obra de arte (para ello necesitaría una experta como mi hija a la que se le pondrían los pelos como escarpias si descubriera este post) Porque lo de menos son las heces, sino a qué nobles testas coronan. Y eso es lo inadmisible. País de trepas y pelotas. Cultura que pasa por el filtro de la ideología política. El abuso en las excusas que utilizan al público familiar para impedir mostrar sexo o cabezas enmierdadas, mientras la satuación de imágenes violentas, sangrientas y corrupción a diestro y siniestro son aceptadas.

Abundando en el tema de "cagadas artísticas", el mismo diario publica que ayer recibió un sobre en su redacción, con remitente anónimo, que incluía el cuadro "Cibeles Láctea" del pintor Antonio de Felipe, que desapareció de un despacho del Ayuntamiento de Madrid años atrás. La pintura llegó rajada por uno de sus lados y algo deteriorada en general, debido al "correcto" sistema de transporte utilizado, entiéndase vía epistolar, por decirlo finamente.
Y adjunta, una carta explicativa: “la historia es muy sencilla". Esta es su versión: “Cuando llegó el Sr. Asúa, como concejal a la Junta de Retiro, entre otros cambios, mandó quitar este cuadro porque dijo, según cuentan —yo no lo escuché—, que era ‘feo de coj...’. Y con las mismas, desde la Junta se mandó de nuevo a Casa de Vacas. Allí estuvo el cuadro dando vueltas, durante bastante tiempo, sin que nadie reclamase el mismo, entre cajas y trastos de las diferentes exposiciones. Hasta que hace unos años, cuando en Casa de Vacas se hizo una remodelación, aprovechando que yo estaba por allí controlando la obra y que el cuadro estaba prácticamente entre las cosas que se iban a tirar, y seguía envuelto en el mismo papel de burbujas del traslado, cogí, con toda naturalidad, la lámina y me la llevé para casa”. La carta concluye: “Permítame que no le diga mi nombre por razones obvias. Soy funcionario del Ayuntamiento. Gracias, y perdón por las molestias”. Y aquí lo tenéis, con sobre y todo. Tampoco voy a ponderar yo su valor artístico, aunque en mi modesta opinión forma parte de ese estilo que podíamos llamar "Que bien pinta el hijo de usted, Señor@ Alcalde" Y no me extraña que el funcionario haya decidido devolverlo ante la idea de truncar su carrera por apropiarse indebidamente de un objeto calificado de "feo de coj..." Y lo ha dicho él, que no he sido yo.




Pero no quiero terminar este post, sin de algún modo congraciarnos con el arte. Ese que los personajes  que habitan en las alcantarillas de la política no han logrado corromper ni enmerdar, invitándoos a disfrutar de dos exposiciones que tienen lugar en Madrid estos días:

La Exposición de Cezzane en el Museo Thyssen Bornemiza
 http://www.museothyssen.org/thyssen/ficha_artista/129


Y otra: "Las damas Olvidadas de Eulogio Varela" en el Museo de la Ilustración ABC

                                
http://www.metropoli.com/blogs/miradas-al-fresco/2014/02/06/las-damas-olvidadas-de-eulogio-varela.html


Y es que, a veces, la relación política y arte nos lleva directamente a las cloacas del ser humano. Por desamor al arte. Por intereses creados.
Por favor, tiren de la cadena al salir del post.
Porque nadie es perfecto.

lunes, 3 de febrero de 2014

SÉ LO QUE HICISTEIS EL ÚLTIMO "FINDE"...

...¡Pasarlo superguay en el Congreso de Valladolid!

Todos acudieron a la cita en plan relaxing. Ellos, con su uniforme "business casual" a base de jerseycitos de pico, no sobre los hombros porque no olvidemos que estamos en Febrero y en tierras castellanas, descorbatados y con sus americanas abiertas. Ellas, con sus chaquetas en colores primaverales ( no en vano el domingo era el último día de rebajas, y aunque todavía no es oficial la Primavera en El Corte Inglés, si florecía ya en los corazones y en las vestimentas de nuestras peperas) Y ...¡venga! todos a reflexionar en colores sobre las tensiones internas, la unidad del partido (que se escapa por la derecha, dejándolos más en el centro no por decisión propia sino por ausencia ajena) y la firmeza contra el independentismo catalán, no sin olvidar unas puyitas a Rubalcaba que, a pesar de estar bastante silencioso durante toda la legislatura dejando hacer, o mejor dicho deshacer, a Rajoy y sus muchach@s, le han sugerido que calladito está más guapo.
Quizá todavía con los ecos de la serie Isabel anidando en su cabeza, a nuestro Presi no le ha temblado la voz al indicar que Cataluña se encamina hacia la Edad Media. Pero yo al único que recuerdo de semejante guisa es a Aznar en esa vergonzosa foto de Cid Campeador que no sólo es motivo de sonrojo para sus correligionarios, sino para todos los súbditos que le sufrimos.

Resumió su hoja de ruta frente al tema como "Todos los españoles formamos parte de una gran alianza para competir desde Europa en un mundo cada vez con menos fronteras y más integración". Esto último, lo de la integración , debió decirlo en relación a todos los miles de inmigrantes que en un ataque de igualdad suprema , ha dejado fuera de las prestaciones sanitarias y sociales. Y en cualquier caso, aparte de su loable rumbo, no estaría de más, colocar algunas  algunas indicaciones, ya sea vía GPS o en plan señal tradicional, de cuál es el punto al que nos dirije, por dónde vamos a llegar y qué nos esperará en la meta. Y no es por criticar. Yo es que tengo mala orientación y me lo tienen que explicar clarito porque si no me pierdo en el intento.
Tampoco quiso dejarse en el tintero un tema clave como la recuperación económica. Eso sí, lo hizo con algunos borrones y muchos huecos en blanco. Insistiendo en ese mantra de que vamos mejor, mucho mejor, aunque no todo lo que él quisiera. Como ese padre al que le entregas el boletín de notas y, aunque satisfecho por progresar adecuadamente, insiste en que se puede uno esforzar más. Y aunque le estén dando zapatilla en educación y sanidad por todos lados, insistió en que uno de sus grandes logros ha sido preservar la calidad de estos servicios, pero se le acabó la tinta para comentar los últimos reveses en la privatización, o como ellos prefieren, la externalización de la sanidad en la Comunidad de Madrid.
Terminó, con fuegos artificiales y un Viva Cartagena, referido a la inminente reforma fiscal, que va a ser la panacea para reactivar la economía, el ahorro y el empleo. Y con la emoción de su propuesta, en un punto ya de éxtasis de patriotismo y autoafirmación, concluyó que los españoles nos hemos rescatado a nosotros mismos. Solos frente al peligro. A pecho descubierto. Mientras el clamor popular, ya orgásmico, amortiguaba el estallido de la pronunciación típica de sus "eses".
Para acabar, en un guiño a Arantza Quiroga, como diciendo "no me dejes tú también", agradeció el enorme respaldo del PP Vasco, ante los desplantes de Jaime Mayor Oreja, Ortega Lara, María San Gil, que andan buscando su VOX.
Como colofón, digo yo, una contundente sopa castellana, un lechazo de la zona, todo ello regado con un buen Rueda, porque ya se sabe el grito de guerra del PP: ¡VIVA EL VINO!

Y ya los tenemos a todos de vuelta en Madrid. De lunes. Con sus trajecitos grises, las corbatas ahogándoles el riego cerebral y los tacones alejándolas de la realidad, después de un "finde" divino de la muerte.
Porque nadie es perfecto.