viernes, 6 de septiembre de 2013

SAN MATEO, ¡RELÁJAME , POR DIOS!

Y es que con esto de la crisis tenemos a todo el santoral revuelto. San Cristóbal, patrón de los automovilistas, parece que he hecho bien su trabajo al reducirse el número de accidentes en esta vuelta de vacaciones, pero la Virgen del Rocío...¡mi "arma", qué con la "caló" no tenías cuerpo "pa ná"! Porque por mucho que diga el gobierno, con ese derroche de fuegos de artificio (nunca mejor usado este término) de los 31 que se han colocado, como diría mi abuela, la cosa está muy mala...Yo conozco a 2 de esos 31, y ninguno de ellos supera los 500 euros brutos mensuales. Quizá entre todos los colegas de facebook podríamos elaborar la lista final, incluyendo sueldos y duración del contrato, y así veríamos si la cosa da para fuegos artificiales o simples petardos.
Pero el otoño se presenta calentito y necesito relajarme. Así que después de leer el blog de mi amiga y compañera en estas lides, Silvia, que transmite tan buen rollo y serenidad en su recorrido gastronómico y cultural, he decidido imitarla, sin que sirve de precedente, e invocar a San Mateo, uno de mis calles favoritas de Madrid.
He comenzado entrando en Travesía 4, una galería de arte en un espacio muy singular, con sus portones de madera que parecen una antigua carbonería, y donde siempre, tras sus puertas, ofrecen una selección de obras interesantes y vanguardistas.
                                                          Galería Travesía 4

Luego, he decidido sumergirme en ese mundo etéreo y evanescente que es el Museo Romántico, y tras visitar sus salas y empaparme de tules, abanicos y lazadas, me he sentado a tomarme una tila en su Jardín interior. Un oasis en pleno barrio, rodeada de vegetación y el sonido cantarín de su fuente. Y oye, parece que voy mejorando.
                                                          Jardín del Museo Romántico

A continuación he decidido fundirme los 20 euros de mis derechos de autor en una tienda preciosa: La Maison de Poupée. Un espacio mágico con ropa, complementos y objetos de decoración muy originales , con paredes de ladrillos y suelo envejecido, a unos precios que, en rebajas, resultan bastante ajustados. ¡Ah! Y unos probadores con cortinajes donde te sientes Pretty Woman.
                                                                    Maison de Poupée

Necesitaba un gin tonic pero ¡ya! Y para ello, nada mejor que "Olé Lola". Un lugar perfecto como "afterwork", picar algo o simplemente tomarte una copa. Tienen una extensa gama de combinados y el ambiente entre gótico-folclórico te seducirá con sus taburetes con respaldo de calaveras y sus cuadros salpicados de peinetas, mantillas y toreros modernos.
                                                               Tasca Olé Lola

Y como ya tenía la gusa en el cuerpo, me he decidido a cenar en "Pa jamá" ,un local totalmente surrealista por lo increíble de su fusíón: mobiliario y decoración tirolesa y platos típicos españoles. Así que te puedes meter un rabo de toro entre pecho y espalda mientras un reloj de cuco te da la hora.
                                                                  Restaurante "Pa jamá"


Oye y San Mateo ha hecho el milagro. He salido como nueva. Pero al llegar a casa he puesto la televisión y he visto a Ana Botella en la rueda de prensa sobre los Juegos Olímpicos, con los periodistas hablándole en inglés y ella sin sin cascos y sin pillar ni media respondiendo lo que le venía en gana... Se me han caído el gin tonic y el rabo de  toro a los pies. Vamos, que si nos llevamos la capitalidad de los Juegos es porque se nos ha aparecido la Virgen...supongo que de Lourdes.
Y es que nadie es perfecto.

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