martes, 10 de septiembre de 2013

¡YO TAMBIÉN QUIERO!

Pura envidia, pensarán algunos. Justicia social, lo llamo yo.
Pero es que asisto atónita al dispendio,vilipendio y una serie interminables de "endios" , y el posterior reparto entre "amiguetes" de los fondos aportados por la sociedad española. Y como no me corte la mano, nada podrá impedirme escribir esta nueva crónica. Y no es que esté llamando a la población para recuperar esas imágenes espeluzanantes de "Viridiana" de Luis Buñuel, donde los mendigos asaltan la casa burguesa y la profanan. No, simplemente demando una explicación y un cambio de actitud. Por derecho. Y ética.
                                                            Viridiana (Luis Buñuel)

Comenzamos nuestro repaso con la confirmación por parte de la Casa Real, del préstamo de 1,2 millones de euros del Rey a la Infanta Cristina para la compra de su chocita en Barcelona. Nada más conocerse la noticia, Francisco Marhuenda, director del diario "la Razón", salió al quite: "Nada de lo que extrañarse. Es lo natural entre un padre y una hija". Natural, si se tratara de una cifra algo más moderada o de los padres corrientes, que no tendrían otra que sacar el dinero de su cuenta y de su nómina. Pero da la casualidad de que al Rey le pagamos entre todos, y si le sobran millones para ir prestando a la familia, a lo  mejor, no estaría de más ajustar el presupuesto de la familia Real y lo sobrante dedicarlo a muchas cosas que me vienen a la cabeza: educación, sanidad, prestaciones...Porque no todos tenemos un rey en nuestra vida, y algunos ni siquiera papá . Y los que lo tienen, quizá no estén posesión de la visa oro ni les brotan los billetes del cajero.

                                           

                                              Chalet de la Infanta Cristina en Pedralbes


Por otro lado, mucho se ha hablado ya del infinito número de invitados que acompañó a la delegación española a Buenos Aires por el tema que es ya "la espina" olímpica. Políticos, empresarios, deportistas...y Amaia Salamanca.
¿Y eso? ¿Por su cara bonita? ¿Porque se quedó embarazada de un tampax haciendo unos largos en la piscina? Si  es por eso, que hubieran llevado a Falete, que al fin  y al cabo, algo  más de olímpico tiene al haberse lanzado a la piscina varias veces desde ese trampolín, que temblaba nada más verle en el famoso programa de televisión. Incluso hubiera resultado casi tan  gracioso como Ana Botella hablando en inglés, y en vez de a café con leche,  hubiera seducido al comité invitándole a rebujito, que dejó claro que estaba más por el sake japonés.                               
Y siguiendo con el tema alcohólico, en la resaca posterior a la designación de la ciudad olímpica, muchos fueron los que se pronunciaron a favor de destinar la cantidad presupuestada para los faustos madrileños a
fines sociales. Cosa, que a mi juicio, sería lo ideal. Pero ninguna autoridad en la materia se ha pronunciado sobre ello.
                                                              Falete Olímpico

Y ya para terminar, no sin antes dedicarle esta semblanza a mi amiga Susana, provocadora del escrito, destacar el gesto moral, inteligente y sensato de Rafa Nadal,  quien declinó la invitación de la delegación española a viajar en un avión privado, considerándolo un lujo innecesario. Remató la faena solo horas después dando una nueva muestra de su calidad no sólo humana sino deportiva, y venciendo en el US OPEN de Nueva York 2013.

                                                                     Rafa Nadal

Y es que, en la vida, a veces sólo caben dos posturas: la de Rafa Nadal y la de ¡Yo también quiero!
Nadie es perfecto. Pero algunos, lo parecen.

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